Búsqueda personalizada

miércoles, 12 de junio de 2013

Maquillaje para disimular pequeños defectos



Como seguramente estés pensando nadie es perfecto (y, en muchos casos, ni falta que hace), sin embargo, cuando existe algún aspecto de nuestro rostro que no nos gusta tenemos a nuestro alcance un aliado perfecto para disimular esos pequeños ‘defectillos’: el maquillaje. ¿Sabes cómo aplicártelo para conseguirlo? Toma buena nota de estos pequeños trucos:

Nariz muy prominente
Cuando no nos gusta, lo que debemos hacer es centrar la atención en otro punto de nuestro rostro. Lo ideal es dar más importancia a los ojos. El colorete también se transforma en un ‘arma’ muy importante. Hay que aplicarlo como si fueran dos pequeñas chapetitas de rubor, sin pasarse. ¿Dónde? Sonríe y encontrarás el punto exacto: en los pómulos y hasta la sien. Además, jugando con dos tonos de la base de maquillaje (uno oscuro para hundir o estrechar y otro un poco más claro para agrandar, dar luz y resaltar) también se pueden obtener los resultados deseados.

Cuestión de labios
Estrechos, gruesos, descompensados... Todos tienen solución si se hace con un buen perfilador del mismo tono que sus labios. Así conseguirás dar la forma deseada. Fundamental: rellenar el labio con el mismo perfilador y es mejor si su fijación es duradera. Para dar volumen, lo mejor es aplicar gloss en el labio que lo necesite, pero sólo en el centro.

Mentón muy marcado
Es difícil de disimular, por eso es mejor trasladar la atención hacia la parte superior de nuestro rostro: ojos, pómulos, frente… En estos casos son muy útiles los iluminadores y el colorete, que deberás utilizar en la parte que quieras resaltar. El colorete debes aplicarlo desde los pómulos hasta el hueso de la sien.

Frente despejada
No sólo puedes disimularla con el peinado. También en este caso los polvos de sol te ayudarán. Aplica sobre la base de la frente, justo en la línea de la raíz del pelo, una pequeña sombra de polvos de sol. En verano dan un resultado fantástico.

Ojos separados, juntos o hundidos
Lo mejor es ahumarlos para que parezcan más cercanos y acercarlos al lagrimal. Las reglas básicas son: las sombras oscuras hunden, y debes aplicarlas en el párpado móvil, cercanas al lagrimal. Las claras aumentan su tamaño, así que déjalas para la parte superior. Tus mejores aliados: el eye liner, que debes difuminar hacia el rabillo del ojo, y la máscara, que debes aplicar sólo arriba.
Si por el contrario, están muy juntos: la zona del lagrimal debe estar más clarita, así creará un punto de luz y parecerá que la distancia entre un ojo y otro es mayor. Un truco: difumina la sombra del párpado hacia la sien y aplícate la máscara de pestañas sólo en la parte final de las pestañas superiores.
Para los ojos hundidos, utiliza colores claros. Olvídate de las tendencias de los ahumados, sólo conseguirás hundirlos más. Usa el eye liner para espesar la línea de las pestañas y recuerda que el iluminador te ayudará a resaltar el ojo.

Cejas muy espesas
Puedes acudir a un centro de estética para que den a las cejas la forma y el color que deseas pero, si lo haces tú misma, puedes aplicar un tinte que las aclare un tono para que no parezcan tan densas.

Adiós a las ojeras
Tienes infinidad de correctores en el mercado y también puedes usar una base de maquillaje uno o dos tonos más clara que la habitual, o bien un iluminador encima de tu base de siempre.




Trucos de maquillaje para dibujar bocas generosas



Evite los colores muy claros tanto como aquellos demasiado oscuros. Es preferible optar por tonos apenas algo más vivos que la carnación natural de la boca y ceder el protagonismo del maquillaje a ojos y/o mejillas.
Huya de las barras de labios ultra-mates, que reducen ópticamente la boca. A más brillo, mayor sensación de volumen. Para un resultado muy natural, maquille los labios con una barra cremosa o satinada en un color natural, y en el centro del labio inferior aplique una gota de gloss para darle un aspecto más carnoso.
Delinear la boca ligeramente por encima de la línea natural de los labios la hace parecer más grande, siempre y cuando se difumine el trazo y se funda con el color del conjunto. Este truco sólo sirve para realzar la forma de la boca, pero nunca para corregirla por completo.
Para redibujar el contorno de los labios a la perfección, conviene cubrirlos antes con base de maquillaje, lo que ayuda a crear un lienzo perfecto para la aplicación posterior de color.
Aplique una gota de sombra perlada o de corrector de ojeras en el centro del labio superior, en el llamado "arco de Cupido". Esto hace que este pico se vea más pronunciado y la boca parezca más carnosa.




Labios llenos de volumen, ¿sabes cómo conseguirlos?



La elección del color. Evita tanto los colores muy claros como aquellos demasiado oscuros. Es preferible optar por tonos apenas algo más vivos que la carnación natural de la boca y ceder el protagonismo del maquillaje a ojos y/o mejillas.

¿Y la textura? Huye de las barras de labios ultramates, que reducen ópticamente la boca. A más brillo, mayor sensación de volumen. Para un resultado muy natural, maquilla los labios con una barra cremosa o satinada en un color natural, y en el centro del labio inferior aplica una gota de gloss para darle un aspecto más carnoso.

El delineador, muy útil. Delinear la boca ligeramente por encima de la línea natural de los labios la hace parecer más grande, siempre y cuando se difumine el trazo y se funda con el color del conjunto. Este truco sólo sirve para realzar la forma de la boca, pero nunca para corregirla por completo.

Y dos trucos de experto...

Para redibujar el contorno de los labios a la perfección, conviene cubrirlos antes con base de maquillaje, lo que ayuda a crear un lienzo perfecto para la aplicación posterior de color.
Aplica una gota de sombra perlada o de corrector de ojeras en el centro del labio superior, en el llamado “arco de Cupido”. Esto hace que este pico se vea más pronunciado y la boca parezca más carnosa.

Fuente hola.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario